Tras un desastre de dimensiones cosmicas, la Tierra ha perdido todo su color, convirtiendose en un yermo monocromatico, y la humanidad se ha transformado: mutantes desfigurados vagan por doquier, aunque algunos supervivientes han logrado seguir adelante en enormes ciudades futuristicas. En este segundo tomo, Avidia, consciente del enorme poder que tiene la Secta, que pretende gobernar el mundo con el poder del color, viaja al monte Kamnavi con sus compañeros para encontrar mas color con el que fortalecer sus armas. Sin embargo, ¡durante el camino son atacados! ¿Acaso alguien los ha traicionado?