Vasti y Kuno, madre e hijo, viven separados en un mundo homogeneizado donde la gente habia confinada en celdas hexagonales y subterráneas, supeditados a la Máquina omnisciente, omnipresente y omnipotente, una suerte de dios mecánico que les procura todo aquello que necesitas y a través de la que se comunican y relacionan. Un engendro que les ha hecho olvidar algo que solo podrán recuperar volviendo a la superficie: su esencia humana.