Ansiedad, estrés, fatiga crónica y depresión: enfermedades que se han convertido en un riesgo para la salud pública y afectan la vida de millones de personas. Tratamos de combatirlas con terapias, medicamentos, descanso y buena alimentación, pero a veces no es suficiente. Existe una cura eficaz contra esas enfermedades, es gratuita, se multiplica entre más la compartes y proviene de ti: la amabilidad. Ser amable tiene cinco beneficios reales que puedes notar de inmediato y que mejoran tu vida día con día: 1. produces más serotonina, eres más feliz, 2. produces más oxitocina, regula tu circulación, y tienes un corazón más sano, 3. detienes la oxidación celular, retardas el envejecimiento, 4. eres más asertivo y alegre, mejoran todas tus relaciones, 5. es contagiosa, cambias tu vida y la de otras personas. Con pequeños ejercicios cotidianos, consejos prácticos y un gran sentido del humor, el especialista en bioquímica David Hamilton demuestra las propiedades de la amabilidad y sus efectos en el sistema nervioso de nuestro cuerpo. El resultado es sencillo: cuando somos amables nos sentimos más felices y nuestros cuerpos están más sanos.